En la carrera de Geología, el trabajo práctico "por excelencia" es la salida de campo ya que permite trasladar el aprendizaje al mundo real, complementando la enseñanza tradicional en el aula y el laboratorio.

Las oportunidades educativas que brindan estas actividades para el aprendizaje son indiscutibles, permitiendo optimizar la relación docente–estudiante, y favoreciendo el tratamiento y desarrollo integral de contenidos conceptuales, de procedimientos científicos y geológicos y de actitudes fundamentales de cooperación y trabajo en equipo, de creatividad, de conciencia con el ámbito de trabajo, entre otras. En definitiva, estas “salidas de campo” son las que permiten vivenciar una instancia de praxis y abordar la enseñanza de manera integrada.

El ordenamiento del aprendizaje obliga a “separar” al conocimiento en diferentes espacios, que no aparecen como “separados” en el campo, ya que se observa el todo; las/os estudiantes en ese ámbito, tienen posibilidades de integrarlo, buscando un significado para los rasgos geológicos en distintas escalas de observación y las relaciones que los conectan.

Actualmente, esta actividad es obligatoria en los planes de estudio y se desarrolla especialmente en el marco de Escuelas de Campo (EC).

La organización de una EC requiere considerar el medio de desplazamiento, el alojamiento y el instrumental necesario para el desarrollo de las actividades proyectadas y alternativas por si surgen problemas climáticos, y la preparación de una Guía de Campo con la información que deben conocer con anticipación las/os estudiantes y los datos e instrucciones que le ayudan a cumplir con las tareas a realizar.

Las/os docentes a cargo deben contar con una sólida preparación para considerar los posibles cuestionamientos de las/os alumnos, evaluar permanentemente sus desempeños y revisar y calificar las tareas que realizan diariamente y el informe final.

En ese sentido, la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UNLPam ha formalizado convenios con otras Casas de Estudio del país al respecto, por lo que puede ofrecer al estudiantado de la Licenciatura en Geología distintas alternativas de EC, en variados contextos geológicos, enriqueciendo así la actividad.

Este año, la estudiante de Licenciatura en Geología Brenda Ramos, participó en la Escuela Internacional de Campo de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ).

En esa institución, esta actividad comenzó como una materia de tercer año, denominada “Práctica de Verano”; debido a la implementación de convenios con las correspondientes facultades de las Universidades de La Plata, La Pampa y San Luis, pasó a denominarse “Escuela Regional de Campo” y posteriormente, al concretarse otro con la Universidad de Bochum (Alemania), tomó el nombre de “Escuela Internacional de Campo”.

Este año, entre el 27/02 y el 13/03, se desarrolló dicha EC en el Departamento de Calingasta, ubicado en el sudoeste de la provincia de San Juan. Las tareas fueron dirigidas por el Licenciado Emiliano De Paula y la Doctora Sofia Pérez Luján, con la colaboración del Licenciado Esteban Pelegrina, todos docentes de la UNSJ. En esta oportunidad, la EC brindó a 22 estudiantes, 15 jornadas de intenso trabajo, en los que pudieron integrar la información teórica con las prácticas de campo, secundados continuamente por los docentes a cargo.

OBJETIVOS

El objetivo de las actividades fue caracterizar geológicamente un sector de la Sierra de Barreal, cercana a la localidad homónima, aplicando conocimientos y herramientas adquiridas en asignaturas ya cursadas. El recorrido incluyó las quebradas de la Cortaderita, del Pórfido, de los Cerros Colorados, de los Tres Saltos, del Salto, de las Piedras Pintadas y de Don Gilberto, entre otras.

Durante esta experiencia las/os participantes pudieron describir, analizar e interpretar sucesiones sedimentarias y cuerpos ígneos aflorantes en la zona de estudio, relaciones estratigráficas de las formaciones presentes con el contexto geológico regional y local y reflexionar sobre la estructuración y las fases orogénicas involucradas en la misma.

El cierre de la actividad se formalizó con un informe final donde se integraron los datos recopilados, estableciendo un modelo geológico evolutivo de la zona visitada en base a las observaciones de campo, trabajo de gabinete e información disponible en la literatura previamente analizada.

Para quienes estudian Geología, la EC permite integrar la información adquirida y desarrollar de forma contextualizada los conocimientos y herramientas propias del futuro ejercicio profesional. La experiencia posibilita el incremento de la motivación y la construcción de aprendizajes relevantes.

Año a año, esta actividad ofrece variantes en su desarrollo y objetivos, pudiéndose planear con diferentes propósitos, lugares y docentes. Es sustancial que la institución apoye este tipo de aprendizaje que contribuyen con una formación integrada, contextualizada y comprometida de las/os futuras/os profesionales de la Universidad pública.

Dra. Elena E. de Elorriaga. Geofísica – Lic. en Geología. Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.