En un contexto de crisis económica y financiera para muchas personas resulta difícil poder acceder a la formación universitaria. Alquileres, impuestos, servicios y otros gastos pueden tornarse inaccesibles para un gran número de familias en el país.
Es por ello que la Universidad Nacional de La Pampa cuenta con distintos tipos de becas (de residencia, de comedor y de ayuda económica, entre otras), cuyo fin es brindar igualdad de oportunidades en los estudios superiores.
Ana Belén Hermosilla (20) y Estrella Cárcamo (21) son dos jóvenes oriundas de Chubut que con el aporte del sistema de beca pueden tener un lugar en la UNLPam. Desde hace tres años, las jóvenes cursan la Licenciatura en Administración de Negocios Agropecuarios y viven en una de las residencias universitarias de Santa Rosa.
Ambas terminaron sus estudios secundarios en el Centro Educativo Agrotécnico (CEA) de Cholila, Chubut, aunque Estrella es oriunda de Gualjaina, en la misma provincia. A pesar de que la decisión de estudiar en La Pampa era firme -principalmente en el caso de Ana- las dificultades económicas se presentaban como un obstáculo. Tal como lo señalaron, si no conseguían un lugar en la residencia de la UNLPam iba a ser imposible continuar sus estudios.
DIFUSIÓN
Las estudiantes relataron que en octubre del año pasado, como parte del viaje de estudios conocieron la Universidad Nacional de La Pampa, donde fueron recibidas por quienes integran el Programa de Difusión de Oferta Académica y Servicios. Previamente, ya se habían contactado con personal de la Facultad de Agronomía, que les permitió la inscripción anticipada. “A mitad de año empecé a averiguar y a mandar mails preguntando si en el viaje de estudios podíamos traer los papeles para anotarnos en la carrera. Las inscripciones abrían más adelante pero no teníamos la posibilidad de volver en diciembre”, contó Ana. Además de conocer las sedes de Santa Rosa y General Pico, cuando llegaron a la Universidad pudieron averiguar en detalle las becas disponibles y llenaron las solicitudes correspondientes.
En diciembre recibieron la confirmación respecto a la beca de residencia y en marzo les confirmaron las becas de ayuda económica y DE comedor. Gracias a ello, las jóvenes chubutenses pudieron cumplir su sueño de empezar una carrera universitaria.
FAMILIA
La localidad de Cholila cuenta con poco más de 2.200 habitantes. La realidad de los pobladores no es sencilla, como tampoco lo es el caso de las estudiantes. “Mi grupo familiar lo integran mi mamá, mi papá y tengo cinco hermanos que viven en otros lugares. Yo soy la hija menor, pero por suerte siempre me apoyaron”, aseguró Ana. Y agregó: “Yo sabía que acá no iba a poder alquilar ya que estaba fuera del alcance de los bolsillos de mi familia. Sin embargo, logramos empezar y seguir la carrera gracias a las becas que nos brinda la universidad y son muy importantes. También hay otras de índole nacional como la beca Progresar”.
La situación de Estrella es similar. “Yo vivía con mi mamá, mi padrastro y dos hermanas menores. También estuve algunos años con mis abuelos. Mi mamá siempre me apoyó en todas las decisiones que tomé. A mis abuelos les avisé unos días antes porque sabía que no les iba a gustar mucho la noticia. Principalmente, tenían miedo de que me viniera a vivir tan lejos y que no tuviera a nadie conocido. Ahora cambió la situación y ya se acostumbraron”, narró. “Yo vengo de familia de bajos recursos y no me podían pagar un alquiler para venir a estudiar. Cuando terminara el secundario pensaba que tendría que ponerme a trabajar. Eso fue hasta que conocí la posibilidad de las becas y cambió mi situación”, añadió.
La Universidad Nacional de La Pampa dispone de diversos tipos de ayuda que hacen posible a cualquier joven proseguir sus estudios superiores. En ese sentido, el factor económico deja de ser un impedimento ya que hay varios caminos por los cuales se puede continuar la formación académica. “Mi mensaje para quienes deseen estudiar es que no los frene el tema del dinero porque van a recibir ayuda de un montón de lugares y personas. Hay un respaldo muy importante en lo económico y humano. Es posible hacerlo”, alentó Ana. “Siempre hay gente que va a brindar ayuda. Hay que animarse, se puede”, concluyó Estrella.
María Soledad García. Comunicadora social